La próstata es una glándula pequeña de los hombres que genera un líquido que sale con el semen. Con el paso de los años, la próstata aumenta de tamaño. Si es demasiado grande, puede causar problemas al orinar. Esta afección se llama hiperplasia benigna de próstata (HPB) y no se trata de cáncer. Es la patología más frecuente de la glándula prostataria.
Afecta a un 40% de los varones mayores de 60 años y el 80% de los mayores de 80%. En muchos casos dificulta la micción y produce sintomatología que altera de manera importante la calidad de vida del paciente. El diagnóstico precoz y su tratamiento puede evitar en muchos casos la aparición de complicaciones como la retención de orina, la insuficiencia renal, los cálculos vesicales entre otros.
Recientemente han aparecido nuevas técnicas que mejoran los tratamiento de esta enfermedad.
- Ecografía urológica abdomino-pélvica
- Flujometría, Estudios Urodinámicos en régimen ambulatorio
- Ecografía transrectal con biopsia prostática de alta resolución y bajo sedación
- Endoscopia flexible bajo sedación
- Tratamiento farmacológico individualizado
- Tratamiento quirúrgico convencional
- Resección transuretral de próstata y Cirugía abierta convencional
- Resección transuretral de próstata con tecnología Bipolar (Mínima estancia hospitalaria)
- Tratamiento quirúrgico mínimamente invasivo:
¿Qué es la Hiperplasia Benigna Prostática?
La Hiperplasia Benigna de Próstata, o HBP, se refiere al crecimiento no canceroso (benigno) de la próstata. La próstata normal crece rápidamente a partir de la pubertad, sufriendo cambios histológicos (a nivel celular) a partir de los 40 años. Es una enfermedad muy común en hombres mayores, Actualmente, la Hiperplasia Prostática no puede prevenirse. Es importante destacar que la HBP no es cáncer, ni desarrollará cáncer en un futuro.
Aunque la HBP puede no causar sintomatología alguna, algunos hombres eventualmente desarrollarán sintomatología urinaria obstructiva baja. Algunos ejemplos de estos síntomas son la sensación de no vaciar por completo la vejiga o de tener que ir con frecuencia a orinar, la presencia de un chorro débil, o bien el hecho de despertarse con frecuencia en la noche para vaciar la vejiga. Esta sintomatología puede llegar a interferir en su calidad de vida.
Cerca de una tercera parte de los hombres con HBP eventualmente tendrán sintomatología que interfiera con sus actividades, o bien, presenten otros problemas relacionados que requieran tratamiento. Al envejecer, estos síntomas pueden volverse cada vez más molestos.Los síntomas generalmente son independientes al tamaño de la próstata, y algunos pacientes con próstatas pequeñas pueden tener sintomatología muy importante.
¿Cuál es el pronóstico?
En general es bueno, pero en ocasiones puede favorecer que la orina estancada se infecte, incluso que esa infección ascienda al riñón originando pielonefritis e insuficiencia renal, cálculos a ese nivel, incluso pequeños sangrados, lo que llamamos hematuria.