Seguramente en algún momento habrás escuchado hablar de la educación financiera. Ya sea que sea un particular o una persona que invierte en la bolsa, la educación financiera es algo vital para las personas.
Si quieres mejorar tus finanzas, puedes realizar un curso financiero para tal fin. Si quieres invertir en bolsa, realiza un Master Bolsa Granada, si deseas mejorar tu condición laboral y de tu empresa, puedes realizar un MBA. En cualquier caso, un mejor futuro te espera luego de haber estudiado finanzas.
En el día de hoy hablaremos un poco más sobre este tipo de estudios y los beneficios que tiene para tu vida y carrera la educación financiera.
¿Qué es la educación financiera?
La educación financiera es básicamente un tipo de educación que se utiliza con la finalidad de que la persona esté preparada para asumir todos aquellos retos con lo que se encontrará en el mundo laboral y empresarial.
Esta permitirá que comprendas los conceptos básicos sobre las finanzas personales y empresariales. Y, además, te permitirá que puedas manejar de la mejor forma posible tanto tus finanzas como las de tu empresa.
No solo te aporta conocimientos, sino que también te da las herramientas necesarias para que puedas desenvolverte de la mejor forma posible ante las situaciones que puedas encontrarte en el mundo real.
¿Cuáles son los beneficios de la educación financiera?
1. Manejar impuestos
Los impuestos son algo que no puedes evitar y una vez empiezas a generar dinero ya sea como empleado o por medio de un emprendimiento, debes pagarlos. Conocer sobre ellos puede llevarte a ahorrar una buena cantidad de dinero, además podrás calcularlos por ti mismo y de esta forma, evitarás que puedan timarte.
Tal vez los empleados no se encargan de hacerlo directamente, pero cada mes se les resta un porcentaje de su salario y una cantidad fija; que depende de cuánto gane el trabajador. Esta cantidad la declara la empresa ante Hacienda, para cumplir con las leyes como es debido.
Existe una gran cantidad de información relacionada con los impuestos que la gente desconoce. Esto es algo que debes de evitar, ya que además de poder incurrir en algún delito fiscal, cualquier persona puede llegar a timarte con esto.
Por lo general, estos cálculos son llevados a cabo por un contador licenciado, sin embargo, si como dueño de una empresa eres capaz de realizar estos cálculos, podrás llevar un mejor control.
2. Mejorar el rendimiento de tu empresa
Tal vez dentro de tu empresa cuentas con un gerente o administrador experimentado y calificado para manejar el dinero que sale y entra de ésta. Sin embargo, muchas personas son defraudadas por terceros al permitir que éstos manejen su dinero sin darles el seguimiento o la supervisión pertinente.
Incluso si tu gerente o administrador es una persona honesta y de confianza, recuerda que dos cabezas piensan mejor que una. Tal vez, si conoces bien la manera en la que se maneja tu dinero, se te puedan ocurrir ideas innovadoras para que tu empresa rinda mejor.
3. Emprender un proyecto nuevo
Si tienes un proyecto en mente que has deseado emprender durante mucho tiempo, pero no has podido hacerlo porque los números “no te cuadran”, tal vez sea momento de aprender un poco más sobre finanzas y descubrir cuáles son los puntos por mejorar en el plan financiero de tu proyecto, y que se convierta así en una idea más viable.
4. Contratar y manejar un crédito
¿Alguna vez te has visto atrapado en un crédito que pareciera imposible de pagar? Tal vez sea porque no escogiste la opción más adecuada tomando en cuenta tus necesidades, posibilidades y requerimientos.
Cuando aprendes acerca del manejo adecuado del dinero, adquieres habilidades muy útiles que sin duda podrían ayudarte a salir de grandes apuros financieros.
5. Optimizar el rendimiento de tus ingresos
Para muchas personas, sus ingresos se esfuman y muchas veces no saben como ocurrió. Gracias a la educación financiera, podrás optimizar el uso de tus ingresos y hacer que lleguen a fin de mes. Incluso, podrás llegar a ahorrar para el futuro.
Optimizar el rendimiento de tu dinero no es difícil, pero implica una serie de hábitos y acciones que posiblemente no comprenderás si no tienes una educación financiera completa y bien estudiada.